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viernes, 28 de julio de 2006

Play my motherfuckin' song

Hola gentes:

Hoy escribiré algo que sale de mi ronco pecho... y es algo que no he hecho desde no recuerdo cuando, en todo caso, es neto lo que leerán.

Primero que nada me confieso pecoro, mujeriego, briagoberto, fumo como chacuaco y me encanta el sexo rudo. Dicho esto, se podrán imaginar mi perfil, en otras palabras, soy un hombre común y muy corriente.

Pero la cuestión es que a veces, y sólo a veces, es necesario darle un giro a nuestras vidas; sobretodo cuando nos cae el veinte de que la estamos cagando en alguna o todas las secciones que componen nuestro humano ser [y digo que humano, porque luego hay cada cabrón que parece más animal que otra cosa].

El punto aqui es, que de verdad he logrado cambios sorprendentes en mi vida, lo académico siempre y seguirá siendo un problema aparte, pero en el plano personal si he logrado cambiar, pero ¿para qué? Pues para poder estar bien con alguien, que simple y sencillamente ilumina mi vida tan solo con su mirada.

Si, yo sé que suena cursi, pero es neto...

¡ESTOY ENAMORADO NUEVAMENTE!

A decir verdad, a mi también me sorprende todo lo que he logrado, pero bueno, creo que me estoy adelantando un poco; lo más conveniente es que les mencione mis logros:

- Me he vuelto monógamo
- He dejado de beber [sólo en reuniones y en cantidades mínimas]
- El cigarro también lo estoy dejando [me fumo, máximo, 1 cigarrín a la semana]
- Ya le baje un poco al desmadre en la escuela
- Creo que [y muy a mi pesar] me estoy volviendo un poco más responsable
- He mejorado notablemente mi falta de memoria

Como podrán darse cuenta, que alguien con un antecedente como el mío logre esto es virtualmente imposible, y creo que muchos de ustedes me darán la razón.

Pero también creo que, cuando de verdad quieres a alguien, no existen obstáculos ni barreras infranqueables, simplemente es la pereza de la naturaleza del ser humano que evita lograr lo que nos proponemos.

Por desgracia no todo es miel sobre hojuelas [¿han notado lo estúpido que suena eso?], ya que a pesar de todo lo que uno quiera y pueda cambiar, nunca es suficiente para las mujeres.
Una de dos: o los hombres nunca podremos entender a las mujeres, ó tengo una pinche suerte bien perra.

Y he intentado (sólo ésta vez) hacer las cosas bien, con todas las responsabilidad y el protocolo que conlleva una relación, pero parece que ni así logró hacer feliz a la niña de mis ojos... y la verdad no sé si estoy decepcionado o hasta la madre de mí mismo por tanta pendejada.


Baaa... supongo que un buen coyotito me ayudará a planear una nueva estrategia, o ya de plano, a hacerme ver mi triste realidad con ella... quien sabe...

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